Artículo publicado en el País
El líder del PSdeG, Manuel Vázquez, respaldó ayer con vehemencia al alcalde socialista de O Grove, José Antonio Cacabelos, que acaba de ser imputado por los delitos de prevaricación, negociación prohibida a funcionarios y tráfico de influencias al favorecer, presuntamente, a una empresa de su hermano con obras del Plan E. En el transcurso de una visita a la localidad arosana, Vázquez dijo que está "absolutamente convencido de que el alcalde es inocente" y que actuó conforme a la ley. El secretario general de los socialistas gallegos cree que "este proceso arrojará luz sobre la incorruptibilidad" del regidor grovense y que no es sino "una intencionada manipulación para confundir a la Justicia".
Una denuncia penal de un constructor de Ribadumia desencadenó la imputación de Cacabelos, que podría acabar sentado en el banquillo para enfrentarse a una condena de entre seis meses y seis años de prisión, además de su inhabilitación para desempañar el cargo.
Según el auto del juez de Cambados, Juan Carlos Carballal, el 7 de abril de 2008, el alcalde solicitó una subvención de 80.000 euros para construir un edificio administrativo por resolución directa, con la indicación anexa de requerir a un técnico competente el anteproyecto de las obras.
Con fecha 27 de abril, consta la realización del anteproyecto por la arquitecta Carolina Álvarez Míguez, socia del hermano del alcalde, David Cacabelos, en la consultora técnica adjudicataria. El presupuesto global de la licitación y honorarios era de 1.307.968 euros.
El ayuntamiento invitó a participar en el concurso a las empresas Alcarez Cacabelos SLP, Ogrobe Arquitectura SL, Jasc Arquitectos SL, y Jesús Cordeiro Rodríguez, relacionadas entre sí, según el auto judicial, bien por parentesco entre algunos sus socios o por haber participado en otros concursos de la Administración.
Aunque el alcalde no participó en la mesa de contratación, el auto subraya que tuvo conocimiento de toda la "articulación administrativa que tenía un fin claro y preciso: dar cobertura legal a un contrato favorable a su hermano y para ello se formó un paripé con invitaciones ad hoc".
En su declaración judicial, el alcalde dijo, entre otras cosas, que no sabía que en Jasc Arquitectos trabaja el marido de Carolina Álvarez, tampoco que en esta empresa fuera socio Jesús Cordeiro y que también desconocía por qué la misma entidad bancaria avala a todos los arquitectos y al constructor Álvarez Prol.
También declaró que no tuvo conocimiento de que el proyecto tuviese deficiencias y que, en todo caso, el secretario no le notificó ni por escrito ni verbalmente ninguna irregularidad antes de la adjudicación definitiva. "Nunca me planteó ningún tipo de duda respecto a la posibilidad de una prevaricación", subrayó Cacabelos.
Por último el alcalde apuntó que las dudas surgieron a raíz del escrito que presentó el denunciante en el ayuntamiento y recordó que su hermano hizo varias obras en O Grove con el anterior gobierno popular
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