Noticia publicada en Faro de Vigo
El alcalde sostiene que el "afán de protagonismo" y las "ansias políticas" del concejal socialista llevaron a este a "criticar sin sentido" algunos aspectos del "espectacular" evento
MANUEL MÉNDEZ - O GROVE Miguel Ángel Pérez García, el alcalde de O Grove y máximo responsable de Turismo y de la Festa do Marisco, hace balance de la edición de este evento clausurada el domingo, que a pesar de la lluvia y otros inconvenientes resultó "espectacular".
Pero sobre todo arremete contra el concejal socialista José Antonio Cacabelos Rico, al que acusa de haber puesto en peligro la imagen de la Festa do Marisco, pues "con su habitual afán de protagonismo y sus incontenidas ansias políticas no dudó en lanzar ataques constantes con tintes electoralistas contra determinados aspectos del evento, sin importarle el daño que pudiera causar a esta importante cita gastronómica".
El regidor salta a la palestra después de haberse "mordido la lengua" durante días, ya que desde hace años parecía existir una especie de pacto de no agresión durante la fiesta, con el propósito de no afectar a la imagen de la misma. Sin embargo, el hecho de haber coincidido con la campaña electoral hizo que la Festa do Marisco 2012 sirviera también para airear disputas políticas, y eso es lo que ahora más critica Miguel Pérez.
A modo de ejemplo, recuerda que en los primeros días el portavoz de los socialistas, José Antonio Cacabelos, "no dejó de decir que en el PP usábamos la fiesta con fines electoralistas, y llegó a criticar incluso la presencia del presidente de la Diputación de Pontevedra en el recinto". Sin embargo, "pronto cerró la boca, pues debieron decirle que su secretario general y candidato a la Xunta con el PSOE, Pachi Vázquez, vendría a pasearse por el recinto, y por tanto las palabras de Cacabelos carecían de sentido", relata el popular.
Pérez, que muy de pasada también alude al único concejal electo del BNG, Heladio Outeiro, lamenta que ambos mantuvieran "una actitud insensata, miserable y pobre por parte de dos representantes municipales, pues no tuvieron reparos en hablar con toda desfachatez de una supuesta manipulación política del evento por parte del PP".
Sin embargo, "voy a tener que darles la razón, pero por la manipulación política que ellos mismos quisieron hacer del evento, y la gota que colmó el vaso fue el paseo de Manuel Pachi Vázquez por la fiesta, acompañado precisamente por el mismo Cacabelos que criticaba que acudieran ya no candidatos del PP, sino representantes institucionales como el presidente de la Diputación".
Dicho esto, Miguel Pérez sugiere que "la habitual manipulación partidista que practica Cacabelos le ha salido mal, y los hechos han demostrado que por la boca muere el pez".
No satisfecho con esto, el primer edil destaca que "lo único que ha pretendido Cacabelos fue deslucir el evento para así atacarnos políticamente, pero muy a su pesar la fiesta funcionó perfectamente".
Para terminar, Pérez asegura que "a Cacabelos le salió rematadamente mal su sucia jugada, que debemos condenar por cuanto supone de atentado a un bien de todos los grovenses como es la Festa do Marisco".
Transcurrida la Festa do Marisco, y no antes, para no perjudicarla, Miguel Pérez quiso hablar de lo ocurrido el día 7, cuando la visita del presidente en funciones de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, fue saboteada por un grupo de manifestantes, entre los que había una treintena de afectados por las participaciones preferentes y algunos destacados militantes de grupos de izquierdas. Según Pérez, aquello fue "tremendamente negativo para la imagen de la fiesta y del pueblo", aunque quiere hacer una diferenciación. "Entiendo perfectamente la indignación de las personas afectadas -declara el regidor-, a quienes no puedo culpar de nada porque lo preocupante y triste de su situación nos hace estar a su lado y entenderlos perfectamente". Sin embargo, en medio de esos afectados "había un puñado de agitadores políticos que entienden la democracia de una manera repugnante, y seguro que no van a hacer nada parecido en lo que resta de campaña con ningún otro representante político, y eso que el grueso del problema, prácticamente el 90% de las emisiones de este tipo de productos, se hicieron cuando gobernaba la Xunta el bipartito PSOE-BNG". Pérez también dice sentir vergüenza y preocupación "al ver que esos agitadores de izquierdas presumieron de haber echado del pueblo al presidente, aunque afortunadamente la gran mayoría de O Grove y de Galicia no opina así". Y critica igualmente "la lamentable actitud de algún concejal que presumió del sabotaje a la visita de Feijóo haciendo comentarios despectivos y barriobajeros".
Para terminar, dice que "desde el Concello y la Xunta seguiremos colaborando con los afectados, y debo recordar que el PP es el único grupo que está dando soluciones a este tema; pueden gustar más o menos, pero son las únicas soluciones que existen en este momento".
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